29 de Septiembre 2013
DESPIDIENDO A UN BUEN AMIGO
Por : Fernando Llama
El día poco a poco dejaba ir sus últimos rayos de luz. La iglesia lentamente se llenaba de penumbra. Los focos comenzaron a prenderse. Y al igual, , uno a uno y sin prisas fueron llegando los miembros de “la raza” , callados , tristes , y pensativos, sin dar crédito al motivo que nos juntaba
Con los cabellos blancos los unos y pocos pelos los otros , los años habían pasado desde aquellos años 70 . Pero ahí estábamos prestos a la cita , Íbamos a despedir a uno de nuestros miembros distinguidos que partía , boleto sencillo – solo de ida- . Destino: más allá del sol. Motivo : Volver ….a casa
Los abrazos fueron más fraternos que en nuestros gloriosos 18 .Las lagrimas fluían más fácil que en los 70´s , menos machos ahora , o quizá más hombres que antes . El crisol en el que se probó nuestra amistad dio sus resultados . Ahí estábamos solo los amigos . Solo los que habíamos pasado la prueba del tiempo . Porque conocidos hubo muchos, pero amigos lo que se dice “amigos” ....fuimos pocos
Primero llegue yo una hora antes, perfectamente trajeado .La reunión así lo ameritaba ,y estoy cierto de que si el caso fuera al revés , Mario hubiera sacado sus mejores galas para acompañarme…lo sé … lo sé bien .
Llegue temprano porque quería hablar con Mario, y tristear un poco, porque estaba seguro que Mario ahí estaría , no se lo perdería por nada, ahí estaría para ver quiénes de sus amigos había ido a despedirlo . En otro tipo de energía claro ..pero ahí estaría
En aquel silencio y viendo el atardecer pude hablar y llorar mientras alguien llegaba y con ello tomaba un poco de compostura
Al poco llego Nando Suárez, entrañable amigo, y tras de él, como iban a faltar Guayo y Javier Saade . Y así empezaron a aparecer los cuates de siempre, los chavos de la banda de finales de los 60´s y principios de los 70p´s , casi el mismo lapso de la vida activa de los Beatles .
Y así llegaron Luis Monroy , Armando Sicsik , Jacobo Gidi , El cuate Jaik y su hermano David, de cabellos de nieve y amistad a prueba de fuego . Keyo Martínez , Julián Ayup , Patricio Sermeño , Hugo Izaguirre , Toño Marroquín, y muchos más que escapan ahorita de mi mente
En medio de la misa y sumido en aquel silencio , de pronto mi mente voló y se ubicó en la esquina de Urrutia y Navarro , sitio de reunión en la Colonia Los Ángeles – frente a mi casa- , en un tibio verano de 1969…..
Y viendo a toda la “raza” nuevamente juntos, casi podía oír las voces y los comentarios:
¡!Qué pues raza a donde vamos a cenar!! . a Pitt ? , al poquito Lunch ? , con Meche la de los tacos de los parados de la Morelos ? , a ver.. tu qué dices Guayo , y tu Keyo ? , y tu Mario ?….!!Mario!!..
¿ Pues donde esta Mario ?...
De pronto, un ruido dentro de la Iglesia me volvió a la realidad justo cuando el padre Ricardo decía:
¡! Mario esta en estos momentos en el Cielo , frente a Dios , dándole cuentas ¡!
¿Cómo? -me dije- ….ya se fue uno de “los nuestros” ?
Voltee a mi lado y le dije a mi amigo Julián : Que efímera es la vida, al terminar la misa mientras tú y yo veremos a done nos vamos a cenar , Mario con quien apenas hace unos días hablábamos , estará en el cielo , frente a Dios …dándole cuentas
Antes , durante y después de la misa , nadie ocultaba su tristeza , nadie oculto sus lagrimas, que fueron un válvula de escape para corazones tan dolidos
Y ahí estaba la madre de Mario, consiente solo en parte – gracias a Dios- del drama por el que pasaba al perder a su único hijo varón. Y estaba Norma , Tere , Lety , y aquella otrora traviesa Elenita ... “Jelenita...como yo le decía” que era una niña cuando Mario y yo andábamos buscando flores que cortar en el tranquilo Jardín lagunero de finales de los 60´s
Juan Carlos su sobrino , emocionado hasta las lagrimas , ver llorar como niño a aquel peladón de mas de 100 kilos enterneció mi alma . Su hija Mary Fer , hermosa como siempre, y ese día … muy triste la pequeña
Su hijo Mario, un chavo de 19 o 20 años lloraba sin cesar , tratando de sacar fuerzas - de donde podía- para capotear 2 broncas que literalmente lo rebasaban:
Perder a su padre y perder a su amigo… !! Y ambos en el mismo día !!
Y ahí estaba Paty, esposa de Mario y Madre de sus hijos . Consternada y en silencio , sin saber a ciencia cierta que pensar o como actuar, el impacto para ella fue terrible , pero segura de que a partir de mañana lo que seguía era “curar a los heridos” – incluyéndose ella misma- y “ reagrupar a la familia” , y como dijo Mary Fer en sus palabras en el Pulpito: Mi papá siempre nos enseño a ser fuertes , a levantarnos de las caídas y a seguir caminando con la cara hacia arriba , y ahora lo haremos con más razón…. para verlo a él.
La misa termino , la gente se empezó a ir poco a poco , y al final quedamos solo , “los de casa” , parientes y no parientes , pero finalmente …” los de casa”
Con la mano puesta sobre las cenizas de Mario , de pronto me vi hablando con él , debí parecer un loco para quienes me vieron , pero fue un pequeño vórtice de tiempo que se abrió por unos momentos para decirle a Mario lo mucho que lo apreciaba , y lo mucho que lamentaba que se me hubiera adelantado “ el cabrón” , sin siquiera haberse despedido de mi, cuando aun nos faltaban muchas horas por reír , muchos temas por hablar y mucho tinto que beber. Al final , un par de promesas … y me salí de la iglesia .
Antes de irme me acerque a ver una foto de Mario que Juan Carlos - su sobrino- había puesto ex profeso frente al altar , con un pensamiento que Mario había escrito hace años cuando en una navidad no tenía dinero para hacer regalos, y que luego me lo había mandado – como a otros mas- , cuando ambos “intercambiábamos” nuestros prístinos escritos de prosa y poesía . Ese texto fue para mí la despedida que Mario me daba por haber estado con él en ese día , y que hoy se los comparto:
Regálame tu tiempo, tus oídos y tus consejos
Escúchame cuando busque tu apoyo
Compartamos alegrías y momentos agradables
Compartamos apuros , problemas y tristezas
Regálame tus experiencias, sentimientos y vivencias
Dame la mano cuando la necesite
En lo que está a mi alcance… tendrás la mía
Regálame un espacio en tu existencia
Quiero decirte que lo mismo que te pido
yo también te lo ofrezco, en tiempo de bonanza
y en tiempo de adversidad
Hagámonos mutuamente un regalo para siempre
Hagamos eterna nuestra amistad
Mario Antonio Pacheco Lazcano
Descansa en paz…amigo del alma
Te voy a extrañar mucho...tu lo sabes