31 de Diciembre de 2015
REMEMBRANZAS DE CUATRO CIENEGAS Y SU GENTE ,
ENTRE LOS EFLUVIOS DE LA AMISTAD... Y EL TEQUILA
Por Fernando Llama
DESPIDIENDO EL AÑO 2015…ALLÁ EN CUATRO CIÉNEGAS
Luego me da por escribir , tan solo para plasmar "hechos" , "fechas" y "detalles" , pues al paso de 100 años , ya nadie sabrá de que existieron, personas famosas , hechos chuscos , y aventuras inolvidables. Seguro que alguien me leerá en 100 años mas y dirá:
Mira compadre...y todo esto pasó aquí en la "CIUDAD" cuando era "pueblo" y mira: Asi se llamaban las gentes , seguro que eran parientes lejanos de Don.......
Heme aquí sentado en la casa de mi suegra en Cuatro Ciénegas frente a la LAP TOP , señal de que no hay nada más importante que hacer, y pensando que por fin se va a terminar este año 2015 , de tan tristes y conflictivos recuerdos. Mi suegra murió justo hace 3 años ,un 4 de Enero de 2013 , y Paty mi esposa es la que viene de vez en cuando a Ciénegas a trabajar su huerto y se queda aquí en la casa -siempre sola y vacía- por varios meses , yo desde que mi suegra murió – por una cosa o por otra- ya no había vuelto al pueblo, rente mi rancho El espejo y con ello ya no había muchos motivos que me hicieran venir hasta acá. Huelga decir que mucho influyó la muerte de mis amigos Miguel Guevara , y Benito González , a los que visitaba siempre en mis periplos mensuales entre Torreón y mi Rancho.
Y bien , parecía que este año no terminaría nunca , desde que se inició , cuando el destino o la suerte me tuvo postrado en el hospital con el pescuezo cosido cuasi de oreja a oreja en los finales de aquel Diciembre de 2014 , pero bueno , ya mejor olvidar eso, y mejor pensar en que este 2015 que me la pasé en tratamientos “varios” , está a solo unas horas de terminar.
El plan de hoy era que Arturo, - esposo de mi sobrina Paty- me llevaría en su camioneta a mi rancho El Espejo , para ver si “aún estaba ahí” , ya que llevo como 4 años que no voy . El caso fue que por una cosa ó por otra, a Arturo se le complico el día y no vino por mi , y el Plan B , de irme al Rancho solo en mi vieja camioneta no era muy factible dado que al llegar al pueblo vi el precario estado de la Pick Up , luego de que Paty se la prestó a su caporal Pablo para su “uso personal” , y este la tiene desde entonces poco menos que “ hecha garras” , por lo que un viaje de 2 horas por el monte hasta el Espejo y otros 2 más de vuelta, la verdad…..no me la jugaba.
Cansado de estar esperando a Arturo me dije: Venga Fer , no te vas a quedar todo el 31 en casa esperando a que se llegue la juerga de esta noche , hay que pensar en hacer algo ahorita , por ejemplo: A quien te gustaría saludar ?..pues ya mañana me voy a Torreón .
Y a mi mente vinieron 3 grandes amigos, 3 personas que son parte toral de mis recuerdos ganaderos, 2 de ellos son vaqueros y el otro el “caporal” y jefe de ellos , así que me fui a buscar primero a Doroteo , uno de los vaqueros que tuvo el Rancho Cerro de la Madera propiedad de mi suegro Don Antonio Garza de la Fuente , y que me dijeron vivía ahora en un cuartito entre unos jacales al rededor de la vieja estación de tren ; que no está Ud. para saberlo , pero me dijeron que a Doro lo dejo la mujer …bueno , pero eso es otra historia , lo actual es que ahora Doro vive como un ANACORETA -pero sin rezar- en un viejo cuartito de block a las orillas del pueblo. Ahora que , decir que "ahí vive" es mucho decir , porque de hecho solo habita ese cuartito los 3 días del mes en que “baja al pueblo” , ya que el resto de su tiempo lo trabaja como vaquero en el rancho “Juncal de Dios” .
Me habían dicho que sería fácil dar con su casa ( cuarto) , pues todas eran de adobe y la de el era de block , sin embargo cuando llegué, pensando que encontraría solo 5 casas donde escoger , me encontré con que había ahí toda una colonia de casas “variopintas” , y de diferentes materiales de construcción , por lo que me tuve que ir preguntando una por una mientras temía que se me ponchara una llanta del coche por lo anfractuoso del terreno y del monte . De pronto una persona me dice: Mire , Vive allá… , allá donde va saliendo en la camioneta del rancho , así que traté de dar la vuelta entre unos mezquites y enfilé con el rumbo que me dijeron … pero ya no lo alcancé.
Así pues y sabiendo que Raúl Valadéz - el otro vaquero amigo- no había bajado ese día al pueblo porque trabaja en un ranchito vecino que tiene un ojo de agua y que otrora fue un balneario llamado "El Anteojo" , me fui a buscar al caporal y jefe del grupo: Manuel Ramírez, de quien si sabía dónde vivía, así que llegando a su casa pregunte por el, esperando que quizá me dijeran que “ya no vivía ahí” – sea en esa casa ó sea en el planeta , vaya Ud. a saber- , pero Si, allá al fondo se oyó un : ¡! Apá..Te habla Fernando Llama Alatorre ¡! , por lo que con tanta “descripción” , presupuse era alguno de sus hijos que me conocía bien.
Al poco tiempo sale el viejo Manuel de 76 años, con el pelo blanco saliéndole por un viejo sombrero de paja, y al instante nos dimos un fuerte y sincero abrazo , pues los 37 años que teníamos de conocernos nos hicieron muy buenos amigos.
Al instante , pedí a uno de sus hijos sacara de mi coche una botella de tequila y unos limones que traía y le dije a Manuel que mandara por unos vasos porque ahí nos íbamos a …emborrachar.
Manuel fue caporal y jefe del rancho El Cerro de la Madera propiedad de mi suegro Don Antonio Garza de la Fuente , y a la muerte de este , aun lo manejó por muchos años más cuando paso a ser propiedad de Toño mi cuñado .
Una vez servidos los vasos de tequila con su consabida sal y limón y degustado el primero cuasi de golpe para que el alcohol llegara rápido al cerebro , las anécdotas empezaron a fluir como por encanto, iniciándolas aquella frase que algún día dijo Manuel cuando me veía llegar a Cuatro Ciénegas en mi camioneta derrochando enjundia , con mis joviales 27 años , luego de haberme convertido en el ganadero más joven del pueblo , bueno... ganadero con “rancho propio” – no heredado- y pagado "dólar a dólar" por mi propio bolsillo , porque también los había ganaderos jóvenes que manejaban el rancho del papá , o que papá se los había... regalado .
El caso fue que , cuando Mario Garza -mi cuñado- y yo le compramos a Benito González (Ringo) el rancho de “ EL ESPEJO , fue ahí que Manuel dijo su célebre frase : Fernando será el último de la familia de los Garza Villarreal que se quedará con vacas cuando ya todos los demás hayan desistido de criarlas , ello por el gusto y animosidad que me veía en todo lo referente al rancho , al monte , y a los animales…y sus palabras fueron proféticas, y si no por la falta de ganas de mis parientes - sobre todo de Toño que era fanático del "monte" y ganadero de corazón - , si por el factor “tiempo” , que se fue llevando uno a uno a los buenos ganaderos de la familia.
Para el 3er vaso -pues no había caballitos- le recordé a Manuel lo duro que fue conmigo en aquellos mis prístinos años de ganadero , cuando, como caporal del rancho de mi suegro debía entregarme las becerras que previamente le había comprado a mi cuñado Toño , y que el , fiel a su patrón , nunca me quería entregar de las "buenas" , de esas brangus negras limpias que yo quería , y en su lugar me daba de las que entonces llamábamos “de color” – tan buenas como las otras- , protegiendo con ello el ganado de su patrón que era todo Brangus negro.
Mientras seguíamos con las remembranzas y el tequila , por un lado y otro salían de su casa familiares que yo no conocía , aunque en veces salía alguno de sus hijos que con una sonrisa en la cara me daban un fuerte abrazo recordando cuando ellos eran pequeños y acompañaban a su padre al rancho a trabajar el ganado …
Los años han pasado Fernando – me decía Manuel- , claro le dije.. “37” para ser exactos , y ahora ya soy bisabuelo de 10 …..hijole….bisabuelo ?...si ,me dice, me salieron las nietas "ponedoras" ….y yo ya no hago nada desde que me cayó encima un papalote para sacar agua y me quebró la pierna.
El 5° vaso nos agarró en silencio viendo el majestuoso "Cerro del Muerto" frente a nosotros y le dije: Cuantas generaciones de Cieneguenses habrá visto pasar este famoso y emblemático Cerro del Muerto , en cuyas faldas creció Cuatro Ciénegas hará cuando menos 331 años , desde que solo era la Misión Franciscana de "San Buenaventura de Cuatro Ciénegas" y dentro del rancho del Marqués de San Miguel de Aguayo y Santa Olalla - según consta en viejos documentos de la época y que son de mi propiedad- ,...hijole - le dije- y pensar que hace tan solo 37 años , los jefes de la ganadería y agricultura del pueblo eran Don Benito González (Ringo) , Don Miguel Guevara , Don Arturo Cantú – minero- , Don Antonio Garza de la Fuente - maderero y ganadero- y Don Antonio Garza Villarreal - constructor y ganadero- , dejando la siembra de granados y nogales en las manos de Doña Lolita Villarreal de Garza – mi suegra- y de los Ferriño y Peraldi en lo tocante a las uvas y sus vinos . Y ahora Manuel: ...ya no está nadie , todos se fueron , y pensar que llegaron a tener miles de vacas cada uno…y centenares de nogales....”y ya no están”. Y si me apuras un poco , en unos años mas , las nuevas generaciones ni sabrán de ellos. Luego de los silencios propios de estar cuasi en "trance" y ya medio pedos, se te ocurren frases profundas y celebérrimas como : ….y ninguna vaca se llevaron …ooooh
Y ahora solo quedamos tu y yo , de 63 y 76 , pero imagina que en 30 años ya no estaremos….y en eso voltea Manuel asustado…¡¡30¡¡…..no verdá….me fui mucho , yo de 93 no creo que le llegue , pero bueno , dejémoslo en 20 y hagamos la lucha de llegar…y muertos nosotros toda la ganadería quedara en manos de puros pen…… bueno….ándale…. sírveme otra.
Y así le repasamos a temas como la cacería en el Cerro de la Madera , recordando aquel año en que se mataron 37 venados - machos cornudos y grandes- y solo entre Diciembre y Enero de aquel año ; años pretéritos en los que llovía todo el año y habían en la sierra “de a madre” Venados , y que decir de aquellos Osos de los que dimos cuenta , luego de que los plantígrados se convirtieran en una amenaza para los ranchos , cuando bajaban de la sierra y se comían becerros y mas becerros , al grado de que no había otra que eliminarlos o no dejarían becerro con cabeza en el rancho.
Entre una anécdota y otra, la botella se fue bajando , hasta que me dió hambre y me dije: o comes algo Fer , ó agarras una papalina que no estarás en condiciones para despedir el año en cuanto anochezca en unas horas más …así que con un fuerte abrazo me despedí de Manuel previo acuerdo de que: Si alguno de los dos se muere , que alguien se encargue de avisarle al otro.
Ahora me faltará localizar para un futuro próximo – espero- a Doroteo Torres y a Raúl Valadéz, ambos viejos vaqueros del Cerro de la Madera primero , y luego Raúl se fue conmigo al Espejo cuando metí ganado por primera vez en 1984, espero hacerlo la próxima vez que venga porque ya pasado mañana 2 de Enero de 2016 , me regreso a Torreón.